Hasta 400 personas podían viajar en el San Giácomo di Galicia, un barco de la armada de Felipe II que se hundió frente al puerto de Ribadeo. En sus cubiertas se libraban batallas contra los protestantes del norte.
Miguel San Claudio, doctor en Ciencias de la Antigüedad, asegura que es "el mejor exponente que conocemos de toda la construcción naval del siglo XVI",
Con papel plástico y lápiz graso, los científicos dibujan bajo el agua su estructura, que en su momento se hacía sin planos. "Colón descubrirá América con estas máquinas, pero no sabemos cómo están construidas", asegura Arnaud Cassenade, del CSIC.
Los cañones, de los que se conservan ruedas, apuntaban a las tropas holandesas e inglesas hasta que encalló en la Ría de Ribadeo. A pesar de que el San Giácomo di Galicia se queda bajo tierra para su mejor conservación, los científicos están subiendo a tierra pequeños enseres, como por ejemplo, un peine para retirar las liendres que, al ser de madera, está conservado, algo que no sobreviviría fuera del agua.
Escuelas de buceo como 'Costa Lugo' harán visitas con arqueólogos previo permiso de la armada, para ver, pero no tocar, la mejor armada de guerra durante siglos.
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