Ladrillo a ladrillo, Gabriel, un joven diseñador gráfico, empezó a recrear edificios históricos en Minecraft para que cualquiera pudiera conocerlos. Así creó por dentro y por fuera la Catedral de Burgos, la de Ciudad Real o el Palacio de Alfajería de Zaragoza.

A su equipo y a él les llevan seis meses terminar cada proyecto. "Lo que más nos cuesta son las bóvedas y los arcos, porque Minecraft no tiene curvas", nos confiesa Gabriel García, un diseñador gráfico que creó junto a María Fernández y Nora Pulido 'Minecrafteate', un canal de divulgación en Youtube.

Un día decidieron usar su talento para alertar sobre el patrimonio en peligro, como la iglesia de Santiago Apóstol en Villamorón, en Burgos, una joya que por dentro se encontraba destrozada.

Gracias al vídeo de Gabriel y sus compañeros se interesó tanta gente que en dos campañas han recaudado más de 40.000 euros para su restauración.

Videojuegos, arte y España vaciada se dan la mano

Como en el proyecto de la ruta por los retablos renacentistas del este de León, cuyo artífice fue uno de los vecinos de Valdavida, un pueblo de 50 habitantes.

Ramón de Poza, que así se llama el vecino, nos cuenta que a quien más llamó la atención fue a los jóvenes que jugaban a Minecraft. Gracias a esta iniciativa que lleva un tiempo en marcha pretenden revitalizar la zona, "de capa caída" según él. Y parece que ha gustado, ya que ahora esta ruta recibe alrededor de 2.000 visitantes al año.