Las claves de este trabajo residen en una sábana verde a modo de croma, un smartphone que hace de cámara, un pie de micro roto que se utiliza como trípode y un soplador para crear los efectos especiales. Tras la grabación entra la magia del montaje y la postproducción y el resultado es sorprendente.

"Solo queríamos que la gente viese que hay niños en Kaduna haciendo algo diferente", explica Godwin Josiah, estudiante y director de cortos.

'The Critics Company' es un grupo de ocho amigos de Kaduna, Nigeria, que se ha convertido en el último fenómeno viral gracias a sus cortos de ciencia ficción. Su periplo cinematográfico comenzó en 2016, después de gastarse los ahorros de un mes en la tela verde que utilizan a modo de croma.

Sus habilidades audiovisuales las aprendieron de forma autodidacta, viendo tutoriales en Internet. Desde entonces, han realizado 20 cortos de diez minutos cada uno.

Un famoso productor de su país vio su trabajo, lo compartió y ahí empezó una campaña de recaudación de fondos gracias a la cual ahora pueden renovar su equipo y producir con más rapidez.

Con su creatividad y economía de los recursos, van allanando el camino para cumplir su sueño. "Uno de los objetivos que esperamos alcanzar en unos años es hacer la mayor superproducción de Nigeria, y probablemente del mundo", añade Godwin Josiah. A sus 19 años, demuestran que para contar historias, el dinero no es tan necesario como la imaginación.