El 24 de febrero de 2021 un hombre paseaba a tres bulldog franceses por las calles de Los Ángeles, pero no con unos perros cualquiera, sino los de la cantante Lady Gaga. Dos atracadores se bajaron del vehículo y forcejearon, y pese a que el cuidador de los animales se resistió le acaban disparando. Uno de los perros consiguió escapar, pero los otros dos fueron literalmente arrebatados de sus manos.

Dos días después de este suceso, la artista publicó un anuncio en sus redes sociales con la esperanza de recuperarlos y dijo que no haría preguntas al respecto. "Mis queridos perros Koji y Gustav han sido robados en Hollywood hace dos noches. Tengo el corazón destrozado y rezo para que mi familia vuelva a estar completa en un acto de bondad. Pagaré 500.000 dólares si regresan sanos y salvos", explicaba en el anuncio que puso en su perfil de Twitter.

La cantante acabó recuperando a sus animales a través de Jennifer McBride, una señora de 50 años que dejó a las mascotas en la comisaría de Los Ángeles. Pero días después, las autoridades descubrieron que la mujer era la pareja de uno de los padres de los secuestradores, por lo que habría estado implicada en el robo y fue por ello condenada a dos años de libertad condicional.

Ahora, reclama a Lady Gaga que le pague no solo los 500.000 dólares del rescate, sino también un millón más por hacer preguntas. Asegura que hubo publicidad engañosa, ya que la recompensa era falsa.