La repentina muerte de Itziar Castro, de 46 años, ha conmocionado al mundo de la cultura, el cine y el audiovisual de este país. La actriz fue todo un referente de la lucha contra el bullying, la gordofobia y la LGTBIfobia en este país, y así lo dejó ver hasta los últimos días de su vida.
El pasado 29 de noviembre, hace apenas nueve días, la artista publicaba en la red social X (anteriormente conocida como Twitter) una profunda reflexión vital, escrita en forma de carta a la niña que un día fue y a la "niña interior" que todavía habitaba en ella. Algunas de sus frases son completamente desgarradoras y evidencian la lucha constante contra el acoso, la injusticia y la incomprensión contra la que ha tenido que batallar no solo durante su infancia, sino también durante toda su vida.
"Querida Itzi: Te diría tantas cosas, cosas como que sigas soñando, que soñando fuerte y con muuuucho esfuerzo, se consiguen los sueños", comenzaba con un toque optimista, que pronto se tornaría en amargo. "Una vez conseguidos no todo es de color de rosa", se avisaba a sí misma, como si hubiera podido viajar al pasado.
"Habrá insultos, golpes, piedras en el camino, pero también mucho amor, cariño, admiración (...) sin quererlo serás espejo para muchos/as/es, (ah sí, habrá más géneros que 2, y las niñas no tendréis que querer ser chicos para poder pilotar aviones o ser campeonas del mundo en fútbol)", escribía en este párrafo, dejando ver su compromiso con el colectivo LGTBIQ+ y el feminismo.
Algunas de sus frases más duras son las referidas al bullying que sufrió de pequeña. "Esos que te insultan, te agreden, te ponen bellotas en el pupitre y te llaman cerdita, serán tus fans", escribía. "Habrá momentos de dolor, emocional y físico, que te dirán que eres insana, y a pesar de cuidarte, algunos querrán que sufras, porque el odio te acechará".
A pesar del sufrimiento que dejan entrever estas palabras, la misiva está salpicada y finaliza con un mensaje lleno de amor y esperanza. "Si a pesar de todo lo positivo que te digo no tienes ánimo, mira esta foto y acuérdate de toda esa ilusión que tenías por conseguir esos sueños y ahora, date las gracias".
La actriz acompañaba esta carta con una fotografía de su infancia, de la niña a la que le hablaba apenas nueve días antes de su inesperada muerte.