Las 7.000 entradas para seguir la cabalgata de Reyes en Madrid se han agotado en tan solo 12 minutos. El plazo de reserva se ha abierto este lunes a las 11:00 horas y, en un momento dado, la web ha llegado a tener una cola de unas 20.000 personas.

Desde el Ayuntamiento han agradecido a todos los ciudadanos el interés que han mostrado en poder asistir a este tradicional evento que pone el broche final a la Navidad, y aseguran que se ha optado por la reserva previa de entrada con el fin de evitar esperas y aglomeraciones en torno a las gradas.

La cabalgata recuperará su tradicional recorrido de cerca de tres kilómetros, entre Nuevos Ministerios y el Palacio de Cibeles. Para evitar aglomeraciones, solo los que hayan solicitado su entrada a través de Internet podrán acceder a estas gradas para seguir el trascurso de la cabalgata. Desde el Ayuntamiento de Madrid, debido a la situación sanitaria, recomiendan que solo asistan las personas con asiento reservado.

Para garantizar la seguridad, la cabalgata contará con un centro de coordinación donde los responsables de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid seguirán todo el recorrido. Además, se reforzarán los efectivos policiales en las zonas donde, tradicionalmente, se concentraba más público, para recordarles la importancia de llevar la mascarilla y mantener siempre la distancia de seguridad.

En dicho dispositivo participarán varios centenares de agentes de la Policía Municipal y de Protección Civil. Asimismo, automóviles con megafonía incidirán en esos mismos mensajes a lo largo del recorrido desde el cierre al tráfico entre Nuevos Ministerios y el Palacio de Cibeles. Estos mismos mensajes para una cabalgata segura se difundirán tanto en las pantallas de las paradas de autobús como en las estaciones de Metro.

Como novedad, este año no se lanzarán caramelos desde las carrozas para que se respete la distancia de seguridad entre las personas.

Por otro lado, el Ayuntamiento indicó que mantiene el compromiso con el reparto solidario de asientos priorizando a niños hospitalizados, menores en acogida, personas con discapacidad y asociaciones del Tercer Sector. Además de las 7.000 plazas en las gradas, se instalarán alrededor de 2.000 sillas en la Plaza de Cibeles, que se repartirán entre personas con movilidad reducida, niños hospitalizados y colectivos del Tercer Sector, como Cermi o Famma.