El escritor Salman Rushdie, atacado el viernes con un puñal por un joven durante una conferencia en el noroeste del estado de Nueva York, sobrevive con respiración asistida, ha informado su agente, Andrew Wylie, en un mensaje al diario The New York Times.

"No hay buenas noticias -dijo el agente- Salman perderá probablemente un ojo y tiene cortados los nervios de un brazo, y el hígado también fue apuñalado y está dañado".

Poco antes de esta declaración, la Policía del estado de Nueva York reveló que el escritor había sido ingresado en el Hospital Eire, en Pensilvania, donde Rushdie "seguía en el quirófano" seis horas después del ataque, lo que da idea de la gravedad de su estado.

Agresor detenido

El ganador del Premio Booker se disponía a intervenir en un evento de la Institución Chautauqua cuando un individuo se le aproximó y le acuchilló. Posteriormente, la Policía ha confirmado que el detenido, identificado como Hadi Matar, un joven de 24 años de Nueva Jersey, le asestó al menos una puñalada en el cuello y otra en el abdomen. Por el momento, aún no ha revelado los motivos de su ataque, que se produjo a las 11 de la mañana local cuando Rushdie se disponía a participar en una conferencia sobre las ciudades refugio.

Un médico que se encontraba en el auditorio atendió al novelista hasta que llegaron los servicios de emergencia y fue trasladado al hospital, donde todavía le estaban operando a última hora del viernes (hora española). El otro conferenciante, Henry Reese, también fue agredido y sufrió heridas en la cara, pero ya ha sido dado de alta.

En la sala se vivieron momentos de pánico después de que el agresor irrumpiera en en el escenario y atacara a Rushdie, de 75 años, tal y como puede observarse en el vídeo que ilustra estas líneas.

Más de 30 años amenazado

El escritor de origen indio ha pasado décadas viviendo amenazado por Irán por su novela 'Los versos satánicos', publicada en 1988 y considerada blasfema por las autoridades iraníes. El entonces líder supremo iraní, el ayatolá Jomeini, incluso emitió en 1989 un decreto para pedir la muerte del escritor.

El Gobierno de Irán acabó distanciándose de la 'fatua' de Jomeini, pero, en 2012, una fundación religiosa iraní semioficial elevó la recompensa por matar a Rushdie de 2,8 a 3,3 millones de dólares.

Aunque las amenazas le obligaron a mantenerse oculto una década, el autor afirmaba en sus últimas entrevistas que la amenaza ya no le afectaba en su vida diaria. De hecho, ha seguido publicando libros con éxito y su nombre ha sonado una y otra vez como posible Nobel de Literatura. El debate en el que iba a intervenir este viernes antes de que se produjera el ataque versaba, precisamente, sobre las ciudades que ofrecen asilo a escritores perseguidos.

Condena al ataque

El primer ministro británico, Boris Johnson, ha condenado el ataque, manifestando su consternación ante el apuñalamiento mientras Rushdie "ejercía un derecho que nunca debemos dejar de defender". "Mis pensamientos están con sus seres queridos. Todos esperamos que esté bien", ha agregado el 'premier'.

Por su parte, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha expresado a su vez su "firme condena" al ataque: "Siempre defenderemos la libertad y la tolerancia en nuestras sociedades democráticas y en el mundo. La violencia y la intransigencia no tienen cabida", ha manifestado en Twitter.