Las cuatro personas detenidas el pasado sábado por pegarse a 'Las Majas' de Goya en el Museo del Prado ya han sido puestas en libertad por el juzgado de Instrucción número 29 de Madrid. Los detenidos, tres mujeres y un hombre, causaron diferentes daños en el museo para alertar sobre la subida de la temperatura global.

Ahora, a los cuatro implicados, las activistas y dos periodistas, se les investiga por la presunta comisión de un delito contra el patrimonio histórico-artístico del artículo 323 del Código Penal, que recoge penas de prisión que van de los seis meses a los tres años, o bien multas de 12 a 24 meses.

"Estoy aquí pegado porque la semana pasada la ONU hacía oficial que ya es imposible contener el calentamiento del planeta en 1,5º, sobrepasando los límites marcados en el Acuerdo de París y comprometiendo nuestra seguridad alimentaria", afirmó una de las activistas.

El ministro de Cultura, Miquel Iceta, censuró los actos: "Mi más absoluto rechazo a un acto vandálico que produce un repudio generalizado. No hay causa que justifique atentar contra el patrimonio de todos".

Se trata de una nueva protesta como la protagonizada en la National Gallery de Londres, cuando dos ecologistas de Just Oil lanzaron sopa de tomate a 'Los Girasoles' de Van Gogh.