Un enorme iceberg se ha desprendido de la plataforma de hielo de Brunt, en la Antártida, casi diez años después de que los científicos descubrieran las primeras grietas. El iceberg tiene un tamaño de 1.270 kilómetros cuadrados, según el British Antarctic Survey (BAS). Lo equivalente a dos veces la superficie de la isla de Menorca.

En un principio, no se cree que la Estación de Investigación Halley, también situada en la plataforma de hielo Brunt, de 150 metros de espesor, se vea afectada, ya que se encuentra en un área de la plataforma todavía conectada al continente. Así lo ha expuesto el BAS en un comunicado.

Los científicos ya preveían que tuviera lugar el desprendimiento del iceberg después de monitorear el área con instrumentos GPS e imágenes de satélite a diario, según ha apuntado la directora de British Antarctic Survey, la profesora Dame Jane Francis.

Se espera que el iceberg no se aleje mucho de Brunt, y encalle en una zona relativamente cercana a la plataforma. Un registro de 25 años de observaciones satelitales sobre la región de Getz en la Antártida Occidental, ha revelado que el ritmo al que los glaciares fluyen hacia el océano se está acelerando.

El hielo perdido de la Antártida aparece con frecuencia en los titulares, pero esta es la primera vez que los científicos han estudiado esta área en particular en profundidad. Dirigida por científicos de la Universidad de Leeds en el Reino Unido, la nueva investigación muestra que entre 1994 y 2018, los 14 glaciares en Getz se aceleraron, en promedio, en casi un 25%, con tres glaciares acelerando en más del 44%.

Los resultados, publicados en 'Nature Communications', también informaron que los glaciares perdieron un total de 315 gigatoneladas de hielo, lo que agregó 0,9 mm al nivel medio global del mar, equivalente a 126 millones de piscinas olímpicas de agua.