Tesla tiene problemas con su sistema de asistencia a la conducción, llamado Autopilot. Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, en inglés), este sistema plantea problemas de seguridad, lo que ha llevado a la marca a retirar dos millones de sus vehículos en Estados Unidos.

La investigación de la NHTSA ha durado dos años, en los que ha llegado a la conclusión que el diseño de esta medida "puede proporcionar controles de uso y participación del conductor inadecuados, que pueden conducir a un uso indebido previsible del sistema".

Como medida de prevención, Tesla instalará nuevas medidas de seguridad en estos vehículos. En agosto, la administradora interina de la NHTSA, Ann Carlson, consideraba "realmente importante" que este tipo de sistemas tuviesen en cuenta que "los humanos confían demasiado en la tecnología".

Este sistema de piloto automático de Tesla permite que los coches giren, aceleren y frene automáticamente dentro de su carril, mientras que el piloto automático mejorado puede ayudar a cambiar de carril en las autopistas, pero no los hace autónomos.

Uno de los componentes de este Autopilot se llama Autosteer, que mantiene una velocidad fija o distancia de seguimiento y trabaja para mantener un vehículo en su carril de conducción. Tesla no ha aclarado si la retirada de estos vehículos se dará también fuera de Estados Unidos.

La investigación se inició en agosto de 2021, después de que se identificasen más de una docena de accidentes en los que vehículos Tesla chocaron con vehículos de emergencia estacionarios. La NHTSA revisó 956 accidentes en los que inicialmente se alegaba que el piloto automático había estado en uso y se centró en 322 accidentes relacionados con el piloto automático en su investigación.

La investigación de la NHTSA sobre Autopilot permanecerá abierta mientras monitorea la eficacia de estos arreglos hechos por Tesla. Los modelos afectados son los vehículos Model S, 3, X e Y.

La actualización incluirá una mayor importancia de las alertas visuales en la interfaz de usuario, simplificando la activación y desactivación de Autosteer y controles adicionales al activar Autosteer, así como una eventual suspensión del uso de Autosteer si el conductor repetidamente no demuestra responsabilidad de conducción continua y sostenida mientras la función está activada, según Tesla.