Elon Musk ha anunciado que la producción de baterías en su Gigafactoría asegura la reducción de un 35% en los costes de fabricación, hasta llegar a los 125 dólares/kWh. Se trata de un gran avance teniendo en cuenta que en los últimos ocho años sólo se ha conseguido bajar ese precio hasta los 227 dólares/kWh, insuficiente para hacer accesibles los coches eléctricos.
Este avance de Tesla supone que los vehículos eléctricos estén más cerca de convertirse en un producto de masas. Con esa reducción, la empresa se asegura un buen número de ventas de su turismo Tesla Model 3, un compacto que podrá comercializar por debajo de los 35.000 dólares.
A pesar de este logro, aún quedan mucho por hacer ya que para que los coches eléctricos consigan alcanzar un precio que compita con los modelos a gasolina o gasoil, el coste de producción de las baterías no debería estar por encima de los 100 dólares/kWh, un precio que Elon Musk quiere alcanzar antes de 2020.