A día de hoy, se dan 150.000 trasplantes al año en todo el mundo, una cifra que podría multiplicarse por diez debido al mero paso del tiempo. Con el envejecimiento de la población, disminuye el número de donantes y aumentan las personas que pueden necesitar un trasplante.

Beatriz Domínguez-Gil, directora de la Organización Nacional de Trasplantes, explica que se necesitarían hasta dos millones de órganos para cubrir una demanda creciente que va a ir a más.

Aunque España es líder mundial en donación de órganos, tampoco aquí llegamos a cubrir la demanda. "Los pacientes renales tienen que esperar una media de 18 a 24 meses. Un 5% puede fallecer en listas de espera", explica Domínguez-Gil.

Además, con la pandemia los trasplantes se redujeron un 20%, algo que puede deberse al colapso hospitalario de pacientes críticos. Solo el trasplante de corazón aguantó bien la pandemia y descendíó un 8%.

Esta semana hemos visto una proeza histórica: el primer trasplante de un riñón de cerdo en un humano. Se trata de una operación pionera que acerca el objetivo de utilizar órganos animales en humanos para cubrir la demanda, aunque los expertos piden cautela.