Basta una pequeña muestra de saliva para saber si tenemos coronavirus. El Centro de Investigación Príncipe Felipe ha desarrollado este método que tiene la misma sensibilidad que una PCR, es más rápido y más barato, según nos cuenta Enric Esplugues, jefe del laboratorio de inmunología.
Además, a diferencia de los test nasofaríngeos -en nariz y garganta-, esta técnica es menos invasiva, ya que puede realizarla el propio paciente con resultados totalmente fiables.
Mediante está técnica, los investigadores aseguran que se podría hacer un cribado masivo de detección de positivos ya que ofrece la posibilidad de localizar pacientes COVID en estadios muy tempranos de la enfermedad.
Un avance científico que podría ayudar a cortar, de una forma más rápida, las cadenas de contagio de coronavirus.
Es un ejemplo más de la importancia de destinar el 2% del PIB a la ciencia. Pueden contribuir a esa petición firmando a través del código QR que acompaña al vídeo o en este enlace.