La tecnología engancha, el riesgo para la salud es real. Un 1,5% de jóvenes sufre dependencia patológica a móviles y tabletas, y un 21% está en riesgo de sufrirla.

Las redes sociales nos integran en la sociedad, pero es un espejismo, la realidad es que disminuyen las relaciones sociales y están relacionadas con los malos resultados académicos. Los expertos además avisan que rebelamos y compartimos demasiada información de nuestras vidas privadas en las redes sociales.

El uso de tecnología cada vez ocupa más parte de nuestro tiempo. Su constante utilización se convierte en un problema cuando interfiere en nuestra vida cotidiana. A muchos jóvenes, sus problemas de autoestima les han llevado a usar el móvil de forma compulsiva.

"Engancha, cada vez le dedicaba más tiempo, y te das cuenta que terminas buscando en esas redes sociales la aceptación que no tienes en tu entorno", explica Daniel Collado, exadicto al móvil.

Disminución de las relaciones sociales o del rendimiento económico, en el caso de los jóvenes, son algunos de los síntomas que presentan los adictos a las nuevas tecnologías. "Estamos en un mundo más individual, dónde no nos relacionamos con el otro", asegura Luis Bononato, presidente de la Asociación Proyecto Hombre.

Instagram, Facebook o Twitter, cada vez hay menos límites entre nuestra vida privada y la pública. "Damos más información de la que deberíamos dar y no somos conscientes", afirma el psicólogo Guillermo Fouce. "Es triste ver un grupo de adolescentes que están juntos pero que están comunicándose por el móvil, cuando lo que deberían hacer es mirarse a los ojos", añade.

Mirarse a los ojos para luchar contra la dependencia de unas herramientas, que cuanto más evolucionan, más casos de adicción registran.