El descenso del agua en la presa de Mosul ha permitido a un equipo internacional de arqueólogos adentrarse y estudiar en profundidad un palacio de más de 3.400 años.

Según ha informado la Universidad de Tübingen la construcción fue levantada por el imperio Mittani, uno de los más desconocidos. Se espera que ahora sea posible obtener más información sobre ellos gracias al hallazgo de tablillas cuneiformes en las habitaciones del palacio.

La construcción cuenta con grandes paredes hechas de adobe de hasta dos metros de grosor. Los muros, que en algunos casos llegan a alcanzar dos metros de altura, cuentan con adornos.

"Los murales fueron probablemente una característica típica de los palacios de la zona, pero rara vez los encontramos conservados. Por lo tanto, descubrir pinturas murales es una sensación", ha dicho Ivana Puljiz, una de las responsables de la excavación.

El palacio se encuentra sobre una zona elevada que en la época estaba a 20 metros de la orilla del río Tigris.

"El hallazgo es uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes en la región en las últimas décadas", ha explicado el arqueólogo Hasan Ahmed Qasim.

Desde 2010 se tenía conocimiento de la existencia de la construcción, pero no se podía acceder a ella debido al nivel del agua.