Un fuerte olor a huevos podridos producido por una contaminación del aire con ácido sulfhídrico ha llegado hasta el centro de Moscú.
Los malos olores a ácido sulfhídrico ya fueron denunciados a principios de mes por los habitantes de los barrios orientales de la capital rusa, lo que ha motivado una investigación de la Inspección de Medio Ambiente de Rusia.
El informe preliminar hecho público por los inspectores señala a varios vertederos en la periferia de Moscú como los responsables de la contaminación .
"La contaminación está formada por componentes relacionados con el tratamiento de los residuos orgánicos, el almacenamiento y producción de derivados del petróleo y el funcionamiento de depuradoras", señala el informe.
Publicado en la revista 'Nature'
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