Dicen que a la tercera va la vencida, pero Franky Zapata sólo ha necesitado una segunda oportunidad para cruzar el Canal de la Mancha en su flyboard.

El pasado 25 de julio caía en aguas inglesas al chocar contra el barco donde intentaba repostar, pero esto va, de caerse y levantarse, por eso en sólo siete días, él y su equipo han logrado hacer una nueva máquina.

"Tengo confianza, como la primera vez. Sólo quiero cruzar", decía Zapata.

En la carrera por cambiar la historia de la aviación le han salido varios competidores, a los que se dirigía así antes de su segundo intento: "Si me están viendo en la televisión, acepto la apuesta".

Quizás la apuesta estaba dirigida en especial a Richard Browning, su competidor británico. Menos de una semana después del fracaso del galo y en el mismo escenario, el bautizado como 'Iron Man' de la vida real, presumía del último traje volador de la marina inglesa.

"Sólo tienes que pensar a dónde tienes que ir y vas ahí", explicaba entonces.

Franky Zapata ha volado en su tabla a 160 kilómetros por hora

Esta revolución tecnológica tiene a todo el mundo en vilo, Zapata ya causó sensación cuando sobrevoló, fusil en mano, los Campos Elíseos bajo la atenta mirada de Macron.

En la playa de Sangatte, también tenía todas las miradas puestas en él. Sólo 20 minutos después de despegar, Krystel, su mujer recibía la llamada más emocionante del día. Apenas podía contener las lágrimas al confirmar que había llegado: "Estoy contenta porque es mucho trabajo".

Volando en su tabla a 160 kilómetros por hora, sobre el Canal de la Mancha, Franky zapata, ha hecho historia.