La inmunidad frente al COVID-19 puede ser de corta duración, según un estudio de 'Nature Medicine' que ha analizado el comportamiento de otros coronavirus estacionales.

Los investigadores monitorearon a diez sujetos sanos y determinaron que la reinfección con el mismo coronavirus estacional se daba con frecuencia 12 meses después de la primera infección.

Precisamente, apuntan en esta investigación, para prepararse frente a nuevas oleadas es importante dilucidar la duración de la protección. En este sentido, consideran que los coronavirus estacionales "podrían servir como modelo informativo".

A pesar de que estos coronavirus estacionales utilizan diferentes moléculas receptoras diferentes, los científicos apuntan que tienen características compartidas, como la duración de la inmunidad. Algo que puede ser representativo también para el COVID-19.

También observaron una menor prevalencia de las infecciones por coronavirus en los meses de verano

Para analizar el periodo de tiempo de estas reinfecciones, examinaron 513 muestras de suero desde la década de 1980 en diez hombres adultos sanos de Ámsterdam. Así, observaron de tres a 17 infecciones por coronavirus por paciente, con tiempos de reinfección entre 6 y 105 meses.

Además, apreciaron que durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre se mostró una menor prevalencia de infecciones para los cuatro coronavirus estacionales, lo que confirma la mayor incidencia en invierno. Una característica que, aseguran, podrían compartir con el COVID-19.