El pasado jueves 30 de junio entró en erupción el Etna, situado en el sur de la isla italiana de Sicilia.

El volcán presenta dos grandes fisuras laterales a unos 3.200 de altitud y continúa lanzando lava, aunque su actividad está bajando de intensidad.

La última erupción se produjo el pasado 25 de diciembre, provocando un terremoto de magnitud 4,8 en el que 30 personas resultaron heridas.