Un hombre vivió uno de los momentos más emocionantes de su vida cuando se reencontró con su esposa, fallecida hace cuatro años. El emotivo encuentro fue fruto de la realidad virtual.

Ha ocurrido en Corea del Sur gracias a un 'reality' llamado "I Met you" (Yo te conocí, en español), y ya el año pasado utilizaron la misma tecnología para reunir a una madre con su hija. Entonces la producción del programa tardo ocho meses en recrear la imagen de la niña y para esta ocasión han necesitado seis meses y una actriz para que imitara la voz y los movimientos de la esposa de Kim.

En el caso de Kim Jung-soo, sus cinco hijos se oponían a que reconstruyeran la imagen de su madre fallecida hace cuatro años víctima del cáncer. Creían que la experiencia resultaría muy dolorosa para su padre, pero éste insistió. Ellos tampoco pudieron evitar emocionarse al ver la imagen de su madre.

Más allá de los límites éticos de resucitar virtualmente a una persona ya fallecida, lo que los psicólogos critican es el ambiente y la forma en la que se ha llevado acabo. Para que este tipo de encuentros sea beneficioso, debería desarrollarse en un ambiente controlado por un especialista y no ante las cámaras de televisión.

Aquellos que están a favor insisten en que es una ayuda para que las personas superen el dolor de una pérdida, pero los expertos dicen que esto no es aplicable a todo el mundo.

Sobre todo porque se debe estar seguro de que la persona que va a realizar el encuentro ha superado la fase de aceptación del duelo. De no ser así, podría remover la negación y hacer todo el proceso incluso más doloroso.

Con el debate en la mesa, lo que no nos deja duda es que la realidad virtual no deja de sorprendernos.