Las Delta Acuáridas serán la mejor oportunidad para ver una lluvia de estrellas este verano. Aunque estos meteoros serán visibles desde el 12 de julio hasta el 23 de agosto, el mejor momento para contemplarlos será a finales de julio.
Este año las Delta Acuáridas llegan en una situación excepcional, ya que en su momento de apogeo la Luna estará casi en fase nueva, proporcionando un cielo más oscuro que facilitará su observación.
Los observadores del hemisferio sur tendrán una visión privilegiada de estas estrellas fugaces, aunque en la zona septentrional también será buena. En cielos oscuros y sin contaminación lumínica podrán verse hasta 20 meteoros por hora.
A pesar de que comúnmente se conocen como estrellas fugaces, se trata en realidad de meteoritos. Reciben este nombre porque se cree que provienen de la constelación de Acuario.
Las Delta Acuáridas son reconocibles por las colas de gas ionizado que dejan tras de sí un 10% de los meteoros.
Otros eventos astronómicos del verano
Las Delta Acuáridas no son el único fenómeno astronómico del que se puede disfrutar este verano.
El pasado 9 de julio, la colocación de la Tierra permitió observar la oposición de Saturno. Utilizando un telescopio, podían verse perfectamente los anillos y las lunas más brillantes del planeta.
Días después podía observarse un eclipse parcial de luna y una 'miniluna'. Esta última, aunque no es tan llamativa como las 'superlunas' muestra al satélite en su punto más lejano a la Tierra.
Uno de los eventos más populares son las perseidas o lágrimas de San Lorenzo. Esta conocida lluvia de estrellas tendrán su apogeo en torno al 12 y 13 de agosto. Este año será menos brillante y no podrá verse tan bien como en otras ocasiones ya que coinciden con la luna llena.
Además, en lugares con poca contaminación lumínica podrán verse constelaciones clásicas del verano. Hacia el sur, encontraremos Escorpio y Sagitario y hacia el norte La Osa Mayor y Menor.
Hasta amenazas de muerte
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