Arrancar a primera hora del día cuesta, y mucho. Según la Universidad de California, el cerebro necesita, al menos 30 minutos, para comenzar a funcionar en pleno rendimiento. Este estudio asegura que lo único que se puede hacer es tener paciencia, ya que pequeños trucos como darse una ducha no ayudan.

Esta etapa de cambio que el cerebro atraviesa nada más despertar se denomina 'inercia del sueño' y no se puede hacer nada frente a ella.

En el caso del café, el estudio sostiene que cuando el nivel de cafeína en el cuerpo alcanza su máximo, han transcurrido 30-60 minutos, tiempo en el que también se supera la llamada' inercia del sueño'.

Los científicos trabajaron con un grupo de 34 personas a las que se les pedía resolver un problema matemático inmediatamente después de levantarse. Después, lo hicieron transcurridos 25 minutos más.