Granjas de trabajadores en Bangladesh se dedican a crear hasta 1.000 perfiles y cuentas cada uno para hinchar los seguidores de una web en solo unas horas.Un reportero de la televisión británica de Channel 4 se hizo pasar por empresario y entró en una de estas granjas de 'clicks'.

Estas prácticas incumplen una de las normativas de facebook que prohíbe la creación de perfiles de personas que no existen, sin embargo, de acuerdo con Néstor Anaya, Profesor de Reputación Online  de la Universidad Francisco de Vitoria, estas prácticas no son ilegales y se pueden encontrar fácilmente.

En una de estas webs puedes comprar 'followers' en Twitter, 2.000 cuestan 26 euros y por diez euros más, 1.000 seguidores en Facebook.

Esta práctica sirve a las páginas web para aumentar su popularidad. Según el experto Gonzalo Martín, de la consultoría Social Media Territorio Creativo, "estas prácticas significan autoengañarte, porque si buscas comunicar, allí detrás no hay gente".

El administrador del juego de Facebook Monopoly Plus utilizó los servicios del taller de Bangladesh, sus más de 60.000 seguidores falsos convenció a muchos para jugar.

El 16% de los compradores por internet se fija en las redes sociales para comprar en una tienda o contratar un espectáculo.

Gonzalo Martín explica con un ejemplo este hecho: "Si vas a contratar a  un DJ en una discoteca, te vas a las redes sociales y ves cuántos fans tiene, a partir de ahí lo contratas".