El submarino nuclear de la Unión Soviética 'Komsomolets', hundido en 1989 frente a la costas noruegas, emite una radiación 100.000 veces superior a lo permitido.
Lo acaba de descubrir un grupo de científicos escadinavos. La nave está además situada en una de las áreas de pesca más grandes del mundo.
Desde la Autoridad Nortuega de Radiación y Seguridad Nuclear han tranquilizado a la población anunciando que "no supone ningún riesgo", pues dada la profundidad a la que se encuentra, los niveles de radioactividad "se reducen rápidamente".
Hasta amenazas de muerte
El precio de divulgar ciencia: amenazas, insultos y acoso, un problema que afecta especialmente a las mujeres
Un arma de doble filo Aunque muchos científicos logran acercar el conocimiento al público, cerca del 50% enfrentan insultos, amenazas e intimidaciones. Esta problemática afecta aún más a las mujeres, quienes constituyen el 57% de las principales víctimas de acoso en este ámbito.