Desde los besos apasionados de la etapa del enamoramiento, a los besos más familiares en la mejilla o incluso los cordiales, más propios de un ritual social que de personas que se aman, todos tienen un significado que define las relaciones entre las personas.
Cuatro razones para besarse
1.Besar refuerza el sistema inmunitario. Cuando besamos podemos mover hasta 36 músculos y el latido del corazón puede pasar del reposo hasta la agitación en unos breves instantes. "Mitiga el dolor y refuerza nuestro sistema inmunitario, libera endorfinas y hormonas como la dopamina y la oxitocina, ligadas al cariño y la ternura", señala señalaba la psicóloga de Hospital Quirón Valencia, la doctora Marina Sangonzalo
2.Si se tiene una buena higiene bucal, los expertos recuerdan que la saliva contiene sustancias que combaten bacterias, virus y hongos, y los intercambios de saliva que se producen en los besos estimulan el sistema inmunitario y lo fortalecen para crear anticuerpos.
3.Besar ayuda a aumentar la autoestima, nos ayuda a estar felices. El motivo es que al besarnos se estimula la liberación de endorfinas, unos opiáceos naturales del organismo que provocan una sensación placentera.
4.Besar quema calorías. Dicen que un beso de tres minutos, al menos, quema doce calorías. ¡Puede ser un buen complemento para la dieta!
Seis curiosidades que igual no conocías
1.Nada menos que 80 millones de bacterias se transfieren durante un beso de diez segundos de duración, según un estudio publicado en la revista de acceso abierto 'Microbiome'. Los autores de la investigación también vieron que las parejas que se besan al menos nueve veces al día comparten comunidades similares de bacterias orales.
2.- Cuando hablamos de la 'enfermedad del beso' estamos hablando de mononucleosis que pueden producirse por dos virus: el virus de Epstein-Barr y el citomegalovirus. Cursa, como toda infección, activando las defensas del sistema inmune por lo que produce fiebre, inflamación de la garganta y de los ganglios linfáticos, sobre todo los del cuello, y afectación de hígado y bazo. Y la culpa no siempre la tiene un beso, lo que pasa es que se propaga a través de las gotas microscópicas de saliva.
3.No solo los hombres se besan, también los animales. "En la cadena filogenética encontramos desde chimpancés y elefantes que se besan, hasta pájaros que rozan sus picos", señala la psicóloga de Hospital Quirón Valencia, la doctora Marina Sangonzalo. "Besar es un poderoso mecanismo de adaptación, pero además de ayudarnos a sobrevivir como especie, el roce de los labios con la piel o con los de otra persona provoca una reacción en cadena".
4.No todas las cultura expresan el amor romántico y/o sexual con besos en los labios. Una investigación ha observado que no hay evidencia de besos románticos en América Central, y ningún etnógrafo que trabaja en el África subsahariana con nuevos recolectores o horticultores guineanos o amazónicos informó de ninguna prueba de besos románticos en las poblaciones estudiadas.
5.Aunque es poco frecuente, algunas personas tienen alergia a los besos. Los síntomas más frecuentes son hinchazón de los labios o en la zona donde se recibe el beso.Hay estudios que dicen que en realidad está provocada por alérgenos procedentes de alimentos o medicamentos que se transmiten a través de la saliva o los labios.
6.Si tienes rágades, conocidas también como 'boqueras', mejor no beses. Causadas por una infección vírica contagiosa común (herpes simple o HSV-1). Cursan como diminutas vesículas llenas de un líquido claro, que luego supuran, se abren, se secan, y finalmente desaparecen. Estas ampollas son contagiosas hasta que se curan del todo, proceso que habitualmente requiere una semana.