Un asteroide de más de nueve metros de diámetro podría chocar contra la tierra el próximo 9 de septiembre a 44.000 kilómetros por hora.

Así lo ha confirmado los expertos en la Conferencia de Detección de Asteroides y Basura Espacial que se celebra estos días en la ciudad alemana de Darmstadt. Si finalmente llegase a colisionar arrasaría una superficie de 2.000 kilómetros cuadrados.

No obstante, este hecho no debería preocuparnos ya que la probabilidad de que ocurra se estima en 1 entre 11.428.

"Con los datos que tenemos ahora, la probabilidad de impacto es equivalente a la de ser arrollados por un tren si cruzamos una vía a ciegas, sin poder ver ni oír si viene el tren, pero sabiendo que pasa uno cada quince horas", ha explicado explica Ettore Perozzi, de la Agencia Espacial Italiana (ASI).

Por el momento se desconoce la trayectoria exacta del astro 2006 QV89, su nombre oficial, pero ya figura en el puesto número siete de la lista de asteroides más peligrosos para la Tierra.

"Ahora está demasiado lejos para verlo y calcular su órbita con más precisión. A partir de julio lo podremos observar de nuevo con telescopios de 8 metros. Entonces sabremos si hay riesgo de impacto o, lo que es más probable, que no suponga ningún riesgo", ha añadido Rüdiger Jehn, director de la Oficina de Defensa Planetaria de la ESA.

Aunque pueda parecer que lo más importante es saber si finalmente chocará o no, los expertos aseguran que en realidad es, en caso afirmativo, cuándo lo hará para tener el tiempo suficiente como para calcular la región donde caerá y prepararse.