En la biblioteca Las Navas de Valencia se puede entrar a la Internet profunda, una red que está más oculta de lo normal. El navegador 'Tor' permite acceder a ella. "La página Web que tú visitas no sabe desde donde la estás visitando ni quién eres, y tu proveedor de Internet desconoce que contenidos estás visitando", explica Noel Torres, impulsor del 'proyecto Tor' en España.

Se calcula que la 'Deep Web' es unas 500 veces más grande y mucho más segura que la que utilizamos habitualmente. "La punta del iceberg de Internet sería lo que nosotros conocemos, lo que consultamos todos los días. Luego existen una serie de niveles que no se ven, donde se desarrolla la Deep Web por capas", explica un periodista especializado.

Esta Internet anonima fue creada en países como Irán para evitar la censura. Dicen que Snowden pudo filtrar sus documentos por aquí y, actualmente, es muy utilizada por el grupo de hackers 'Anonymous'. En la internet profunda se comunican en secreto y buscan pistas de grupos terroristas.

Andrés Ortiz, periodista sevillano, logró contactar en la 'Deep Web' con el grupo terrorista ISIS. "Conseguí material para financiar el Daesh, documentación para poder viajar a Siria y a Irak", explica Ortiz. Porque en la internet profunda, gracias a su anonimato, se pueden comprar pasaportes falsos, armas ilegales, drogas o contratar asesinos.

Los defensores de la Internet profunda saben que hay delincuentes en ella, pero siguen defendiendo su función principal: evitar la vigilancia indiscriminada que los gobiernos realizan en la red habitual.