39 millones de casas en todo el mundo cuentan con un aparato como los roomba, robots aspiradores que limpian pero, al mismo tiempo, mapean y monitorizan cada rincón de la vivienda. "Es capaz de saber cuánto mide tu salón y de detectar objetos como un sofá o una mesa, algo que vende Amazon", afirma César Muela, periodista de 'Xataka'.

La compañía que lo fabrica, iRobot, obtiene así numerosos datos de la intimidad del hogar que ahora también llegarán a manos de Amazon después de que la multinacional de comercio electrónico acabe de adquirir iRobot. "La domótica, esos muebles inteligentes como la lavadora, los accesos a la casa, la temperatura... todo eso permite generar publicidad a la carta y obtener información muy valiosa, que es, prácticamente, un mapa de nuestra vida privada", destaca Francisco Canals, experto en ciberseguridad. Por su parte, César Muela señala que "Amazon es un gran amasador de datos que general perfil de publicidad". Además, Muela afirma que la compra "esta compra es una de las más preocupantes". Sin embargo, Canals recuerda que "se cuenta con una complicidad del usuario" ya que "todos aceptamos la letra pequeña que casi nadie lee".

Ya tenía en su poder las compras y los gustos de sus usuarios, además de otra importante información con sus altavoces inteligentes. Unos datos que ahora podrá cruzar con los nuevos. "Antes de compartir esa mapeo que hace de tu casa la aspiradora deberían preguntarte si quieres", explica Muelas. Ante esta situación, la solución está en la ley. "En la UE tenemos unas regulaciones de privacidad y protección de datos bastante estrictas", explica Muelas, que afirma que, a priori, "estamos bastante protegidos". El consejo que dan al consumidor es que mire muy bien lo que acepta al comprar y al registrar online estos productos.