Badenes y resaltos se han convertido en el enemigo número 1 de muchos conductores. Este tipo de dispositivos diseñados para reducir la velocidad están siendo protagonistas de numerosas protestas para su retirada y la discontinuidad en su uso. Son cada vez más los estudios que demuestran que muchos de ellos no cumplen con la legislación, pero que además han demostrado los riesgos y desperfectos que supone para nuestro coche. A todo ello se añade además la existencia de alternativas menos dañinas pero que pasan de largo para las administraciones por sus mayores costes. Pero los problemas de badenes y resaltos no sólo atañen a la mecánica de nuestro coche y a nuestro confort, y es que también suponen un importante riesgo para la salud de muchos ciudadanos cuyo delicado estado de salud encuentra en los badenes un peligroso enemigo. Este es el motivo por el que Mateo Lafragua, un hombre que ya ha sufrido dos trasplantes renales y continuos traslados en ambulancia por carreteras con gran presencia de resaltos, ha decidido emprender una campaña contra la proliferación de badenes y resaltos en la red de carreteras vasca y que están haciendo la vida imposible a muchos enfermos como él. Lafragua admite que incluso ha estado a punto de perder la vida por culpa del excesivo número de resaltos que existe en la ruta que debe realizar en ambulancia. Este recorrido con una longitud de 7 kilómetros posee nada menos que 19 resaltos que obligan a reducir drásticamente la velocidad y que suponen un importante riesgo para personas con un estado de salud delicado. Además, cada resalto de este tipo obliga a la ambulancia a perder alrededor de 10 segundos de tiempo que puede ser vital en una situación de traslado de emergencia. A través de esta campaña Lafragua no pretende eliminar los resaltos sin más, sino promover la sustitución de los mismos por soluciones que consigan el mismo objetivo de reducción de velocidad, pero sin tantos riesgos. Ejemplos como resaltos móviles o badenes que alteran su densidad en función de la velocidad están sobre la mesa, sin embargo parece difícil que se llegue a un final feliz, incluso teniendo en cuenta casos tan recientes como el estudio en Reino Unido que afirma que . En Centímetros Cúbicos: