Centímetros Cúbicos» Noticias Motor

Si tu coche va dejando 'rastro', este tema te interesa

Tres manchas en el suelo bajo tu coche que deberían preocuparte y una que puedes ignorar

Nuestros coches son máquinas complejas que utilizan numerosos elementos para funcionar. Si notas que tu coche va 'marcando el terreno' a su paso, tal vez deberías hacer una visita al taller.

Publicidad

Nuestros coches son, en realidad, máquinas muy complejas que, en la mayoría de casos, aúnan diferentes sistemas técnicos que, funcionando en armonía, buscan un mismo fin: transportarnos de un lugar a otro de manera rápida, sencilla y segura. Algunos vehículos son más confortables, otros son más dinámicos, otros son más rápidos, pero el principio de funcionamiento es el mismo.

Para que un vehículo funcione de manera correcta, son muchos los elementos mecánicosque, a su vez, deben funcionar de manera adecuada. Hablamos por ejemplo del sistema de lubricación del motor (compuesto por un circuito de aceite que circula por numerosos componentes internos del motor), del sistema de frenado (compuesto por una bomba que amplifica nuestras acciones sobre el pedal de freno para accionar las pinzas o los tambores) o el sistema de refrigeración, que está formado por un circuito lleno de un líquido diseñado para absorber la mayor cantidad posible de calor.

Si alguno de estos elementos no funciona correctamente, nuestro vehículo dejará también de hacerlo. Por eso, es recomendable echar un vistazo a nuestro vehículo de manera más o menos periódica, permitiendo así que nuestro coche goce de una salud mecánica adecuada.

Tres manchas en el suelo por las que deberías preocuparte

  • Manchas negras y espesas: claramente estamos hablando de aceite de motor, que será más negro cuanto más antiguo sea el aceite o más kilómetros haya acumulado. Por otro lado, el hecho de que un vehículo sea diésel hará que el aceite sea aún más oscuro. Si detectas manchas de aceite en el suelo, debes mandar a revisar el coche lo antes posible ya que una fuga grande de aceite puede destruir un motor en cuestión de minutos.
  • Manchas claras, líquidas: si detectas un líquido similar al agua, pero con cierta coloración (roja, azul, verde, amarilla...) y un olor intenso, es más que posible que sea refrigerante. Las fugas de refrigerante suelen deberse a alguna fisura en manguitos o radiadores. Debes controlar cuánto fuga, ya que si el circuito no tiene suficiente refrigerante, el motor podría recalentarse.
  • Manchas amarillentas: en este caso es más que probable que estemos hablando de líquido de frenos-embrague. El líquido de frenos es muy corrosivo, de manera que si detectas una mancha de líquido de frenos deberías revisar rápidamente de dónde procede para solucionarlo. Una fuga en el sistema de frenos puede ponerte en un aprieto muy serio circulando.

Por otro lado, si utilizas de manera habitual el aire acondicionado o el climatizador de tu coche, es posible que encuentres manchas de agua bajo el vehículo. En este caso, no debes preocuparte: se trata del resultado del fenómeno de condensación, cuyo resultado es, simple y llanamente, agua.

Publicidad