Tesla sigue adelante con su plan de crecimiento en infraestructura de recarga a nivel global. Tras la rápida expansión de su red supercharger para conseguir que sus clientes puedan recorrer largas distancias sin preocuparse por la autonomía y la búsqueda de puntos de recarga operativos, Tesla ya piensa en un futuro donde su infraestructura de el salto a los entornos urbanos con cargadores de hasta 72 kW. La red supercharger sigue creciendo en EE.UU. y Europa, sin embargo Tesla ya se ha percatado de que las necesidades de sus clientes van más allá de cubrir largas distancias y que la demanda crecerá rápidamente con la llegada del . Por este motivo y aunque la recarga en casa sigue siendo el punto de carga habitual más recomendable, la concepción de los superchargers urbanos responde a esa necesidad de contar con una infraestructura en ciudad que permita recargar las baterías en cualquier punto con una potencia suficiente y con un coste de instalación inferior a las estaciones supercharger cuyos puntos de carga pueden alcanzar hasta 145 kW. Tesla ha desarrollado un nuevo tipo de punto de carga adaptado a esta nueva idea, siendo un sistema más compacto y de fácil instalación, permitiendo además mantener los 72 kW de potencia sin importar el número de coches conectados. En la actualidad, al usar un mismo supercharger por dos vehículos la potencia de cada conector varía en función de las necesidades de carga de cada vehículo, algo que no sucederá con estos nuevos puntos de recarga para entornos urbanos. Los primeros puntos de recarga urbanos ya han sido instalados en Boston y Chicago para realizar una primera fase en pruebas. En Centímetros Cúbicos: |