AVENTURA, PERO CÓMODA
Tan cara como una casa, pero tiene ruedas
El nuevo Globebus Performance 4x4 es la apuesta más decidida por la vida nómada sin límites. No es solo una autocaravana; es un refugio con ruedas capaz de meterse por donde otros ni se atreven.
Publicidad
Si tienes 120.000 euros y dudas entre una autocaravana o una casa prefabricada, Dethleffs lo tiene claro: lánzate a la carretera. El nuevo Globebus Performance 4x4 es su apuesta más decidida por la vida nómada sin límites. No es solo una autocaravana; es un refugio con ruedas capaz de meterse por donde otros ni se atreven gracias a una base VW Crafter adaptada a las exigencias camperas más extremas. Y sí, cuesta como un piso pequeño en Cuenca, pero a cambio te llevas la aventura incluida.
Dethleffs se apunta así a la moda del todoterreno con su primer modelo con tracción integral, una rareza en su catálogo y una golosina para los campistas más inquietos. Bajo la carrocería semiintegrada de esta "Primera Edición", todo son concesiones al off-road: suspensión elevada, diferencial con bloqueo, neumáticos de 18 pulgadas y hasta una barra delantera con luz adicional. Es más Mad Max que camping convencional, y como buen artefacto alemán, viene de serie con soluciones prácticas pensadas para no depender de enchufes ni campings con pulserita.
Su motor turbodiésel de 2.0 litros y 163 CV, combinado con una caja automática de ocho relaciones, mueve con soltura los más de tres mil kilos de peso en orden de marcha. El chasis ha sido reforzado y la suspensión trasera neumática suaviza los baches como si fueras flotando en una nube bávara. Eso sí, con sus casi 3.900 kg de masa máxima autorizada, necesitarás la ampliación del carnet B cuando la DGT dé el visto bueno a los 4.250 kg. Mientras tanto, mejor tener el C1 o usarla como excusa para sacar el carnet de camión.
Casa con vistas y ruedas
Por dentro, el Globebus Performance 4x4 es todo lo que cabría esperar de una casa sobre ruedas bien pensada para dos personas. El espacio está optimizado al milímetro: comedor delantero con asientos giratorios, cocina con dos fuegos y frigorífico de 133 litros, baño con WC seco y ducha integrada, y dos camas individuales en la parte trasera. Y si lo tuyo es el teletrabajo o ver Netflix en mitad del monte, viene con un módulo 5G que promete velocidades de vértigo hasta en la cuneta más remota.
Dethleffs ha apostado por una estética moderna y cálida en el interior, con paneles de fieltro, tonos madera y detalles en antracita que le dan un aire acogedor y muy escandinavo. El control de luces y depósitos se gestiona desde un panel digital, como en una smart home pero sobre ruedas. El agua se filtra con sistema Grünbeck, y gracias a la batería de litio de 263 Ah y una calefacción diésel, puedes olvidarte de enchufes durante días. Incluso el gas se reduce al mínimo: solo se necesita una botellita de 2,8 kg para cocinar.
La eliminación del clásico compartimento para bombonas permite ganar espacio en el garaje trasero, que puede alojar más equipaje o incluso una bicicleta plegable. Y como detalle curioso, cuenta con una puerta lateral ancha y un escalón eléctrico extensible para facilitar la entrada. Todo lo que ves forma parte del equipamiento de serie de la edición de lanzamiento, que también incluye toldo, escalera trasera y rieles de techo, todo en elegante negro mate. Vamos, que más que una camper parece un SUV de lujo XXL.
Todoterreno de verdad
El alma de este Dethleffs es su base: el VW Crafter actualizado en 2024, que aporta no solo músculo, sino también tecnología de última generación. En cabina encontramos una pantalla de 12,9 pulgadas compatible con ChatGPT, freno de mano electrónico y un diseño más limpio que en muchos turismos. El confort de marcha es sobresaliente, incluso fuera del asfalto, y aunque no es un 4x4 de guerra, puede con caminos rotos, nieve y barro sin pestañear.
Dethleffs no pretende competir con un Land Cruiser camperizado, pero sí con los Sprinter 4x4 de Hymer o La Strada, ofreciendo una alternativa más compacta (6,85 metros de largo) y más manejable en carreteras estrechas o pueblos con encanto. Todo con una construcción robusta y una carga útil suficiente para que dos personas vivan, trabajen y viajen sin restricciones. Lo que no le sobra es margen de peso si vas cargado hasta arriba, así que ojo con las maletas de "por si acaso".
Eso sí, que nadie se lleve a engaño: esta autocaravana no es para todos los públicos. Requiere una inversión seria y una mentalidad aún más aventurera. Pero si te sobra el dinero y te falta tiempo para vivir a lo grande, el Globebus Performance 4x4 es la puerta de entrada a una vida donde la única dirección fija es la del siguiente destino. Eso sí, no esperes encontrarlo barato en Wallapop. Esto es otro nivel.
Publicidad