POR MENOS DE 60.000 EUROS
De origen chino e imagen imponente, este todoterreno destaca entre el tráfico aunque no es barato
El ICH-X K2 cuenta con motorización diésel con 162 CV de potencia para una velocidad máxima de 160 km/h y un consumo de 10,3 litros cada 100 kilómetros. Su maletero suma 535 litros

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Tiene nombre de robot, ICH-X K2, pero no lo es. Hablamos de un coche que viene desde China. En concreto, un todoterreno con características premium para competir contra los 4x4 Mercedes Clase G, Land Rover Defender o el mítimo Land Cruiser de Toyota. Vamos a comprobar si sus ambiciones están justificadas.
El ICH-X K2 se vende desde 58.050 euros, siendo más asequible que el Toyota Land Cruiser (85.050 euros), modelo con el que se puede establecer la comparación más directa porque ambos tienen motorización diésel. En el caso del vehículo chino, su propulsor es un 2.0 litros y cuatro cilindros en línea que entrega 162 CV de potencia para una velocidad máxima de 160 km/h y un consumo de 10,3 litros cada 100 kilómetros, prestaciones inferiores a las del Land Cruiser, que suma 204 CV.
Caja de cambios
El motor del ICH-X K2 se vincula a la tracción total permanente con sistema de control de descenso y selección de control de tracción, además de a un bloqueo de diferencial delantero y trasero, y a una transmisión automática de ocho marchas y paso a modo manual con palanca en el suelo.
En cuanto a maletero, los 535 litros del ICH-X K2 vencen al Land Cruiser y al Defender. El Clase G destaca con sus 667 litros, pero también es un coche más grande que el modelo chino, el cual mide 4,65 metros de largo, 1,92 metros de ancho y 1,87 metros de alto. Uno de los aspectos más relevantes de un todoterreno es la altura libre al suelo para poder traspasar obstáculos en terrenos irregulares. En este sentido, el ICH-X K2 vuelve a ser superado por el Mercedes, pero sus 220 mm ganan al Land Cruiser y el Defender.

Diseño exterior
Las estéticas son similares, casi copias. Cuerpos robustos y cuadrados, con mucho protagonismo de la parrilla delantera y las protecciones para que el coche te pueda llevar al fin del mundo. Son diseños puramente todoterrenos y el ICH-X K2 lo respeta sin despreciar un toque de deportividad en los acabados de su parte delantera.
En cuanto al interior, en el centro del salpicadero del ICH-X K2 destaca una pantalla táctil de 12,3 pulgadas para el sistema multimedia que se conecta de forma inalámbrica a los dispositivos móviles. La tecnología se extiende a los sitemas avanzados de asistencia a la conducción como control de arranque en pendiente, control de crucero, encendido automático de luces de emergencia o protección antirrobo. Un coche con aspiraciones premium pero a un precio de una realidad inferior.
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