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LA DGT RESPONDE

Con los nuevos límites de velocidad, ¿siguen teniendo sentido los badenes?

Ahora que en el 80% de las calles españolas hay que circular a 30 y 20 km/h muchos se plantean si son necesarios estos elementos.

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Ahora que el paisaje de las ciudades españolas ha cambiado con los nuevos límites de velocidad (30 y 20 km/h) y los usuarios comienzan a adaptarse a la nueva normativa, llega la segunda parte de ésta. Si la ley ya se encarga de rebajar el ritmo de los vehículos, ¿tiene sentido que los badenes sigan cumpliendo con esa misma función?

Los badenes actúan como reductores de velocidad. Se trata de una serie de dispositivos que están ubicados sobre la superficie de rodadura para rebajar el ritmo de circulación en ciertos tramos de la vía o en puntos concretos donde el riesgo de accidente es elevado. Además, sólo pueden estar colocados en zonas donde la obligación de disminuir la velocidad esté debidamente señalizada.

La teoría coincide con la de los nuevos límites de velocidad y, precisamente, sobre ello se ha pronunciado el director de la Dirección General de Tráfico: Pere Navarro. El mismo día que entraban en vigor los cambios de las ciudades tuvo un encuentro online en el que los usuarios pusieron el tema sobre la mesa. Si se ha llevado a cabo una reducción generalizada, ¿esto se traducirá en la desaparición de los badenes?

Badenes polémicos
Badenes polémicos | Antena 3 Canarias

Problemas y soluciones diferentes

Según la respuesta de Pere Navarro, estos dispositivos podrían tener los días contados en las vías que acaban de estrenar límites: “En las calles 30 no tienen sentido los badenes. Confiamos en que, poco a poco, veremos cómo desaparecen los badenes en ellas”. Los detractores de estos reductores estarían de suerte y obtendrían, así, una respuesta a las quejas que versan acerca de los efectos negativos que tienen sobre determinamos componentes de los coches.

Eso sí, el máximo dirigentes de la DGT ha recordado que la nueva normativa y estos reductores de velocidad dan soluciones a problemas diferentes. O lo que es lo mismo, la llegada de una no implica la erradicación de los segundos: “Los badenes están dirigidos a los coches y a un espacio puntual, pero el nuevo límite 30 km/h tiene que ver más con el calmado del tráfico en zonas donde muchos actores conviven e interactúan entre sí y en lugares más amplios. Además, esta limitación no es para toda la ciudad”.

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