La iniciativa social ‘Kilómetros que importan’ ha conseguido involucrar a los madrileños para que compartan solidaridad, recorriendo 22.223 kilómetros por las calles de la capital, a bordo de los 500 Citroën C-Zero de la empresa de en el Día Mundial de las Enfermedades Raras. Los kilómetros realizados han permitido conseguir la cifra de 11.111,5 euros, que ambas entidades donarán íntegramente a la construcción de ‘El Cole de Celia y Pepe’, un proyecto inclusivo de escuela para niños y jóvenes con enfermedades neurológicas que se manifiestan en trastorno general del lenguaje. Cada dos kilómetros recorridos han permitido sumar un euro para este primer gran proyecto de la Fundación Querer. El Cole de Celia y Pepe abrirá sus puertas en Madrid con un proyecto inclusivo y especializado en “enseñar diferente a niños diferentes”. La Fundación Querer ha desarrollado un método educativo para enseñar a leer y comprender, denominado “Aprendo leyendo”, basado en evidencias neurocientíficas, y liderado por la creadora del PAFPROGRAM estadounidense, Phyllis Bertin. Dicho sistema está basado en experiencias con niños que tienen TEL incluyendo dislexia grave, hiperactividad, déficit de atención y pérdida de memoria transitoria. Según ha declarado Concha Caja, directora de Comunicación de , “ ha sido una jornada cargada de solidaridad en la que una vez más se ha mostrado el lado más humano de los ciudadanos, implicándose con esta iniciativa para apoyar a los niños con enfermedades raras de la Fundación Querer”. La directora de Comunicación de Citroën ha querido destacar que “hemos conseguido que por primera vez la movilidad se haya puesto al servicio de una causa social y, en concreto, a la construcción de ‘El Cole de Celia y Pepe’”, a lo que añade “desde Citroën, como marca solidaria y comprometida, continuamos trabajando todos los días para favorecer el bienestar de las personas, teniendo siempre presente el espíritu ‘Feel Good’ en todas y cada una de las actividades que desarrollamos”. Para Fernando Izquierdo, director General de emov, “es un auténtico placer para emov haber impulsado este proyecto de la Fundación Querer. Somos una compañía joven, nacimos hace poco más de dos meses, y para nosotr@s ha sido una oportunidad para demostrar a través de esta acción los valores que nos definen y la personalidad de la marca.” A lo que ha añadido “emov siempre tiene en mente a las personas y la comunidad con las que se interrelaciona, en este caso los habitantes y ciudadanos de Madrid”. Por su parte, María Jesús Pascual, pediatra y coordinadora de los departamentos de Neurología e Investigaciones Científicas de la Fundación Querer ha declarado que “desde la Fundación Querer queremos hacer investigación científica y genética para intentar descubrir cuáles son los causantes de estos trastornos, con el objetivo de sumar y aunar a la comunidad científica, educativa y neurológica y las nuevas tecnologías para ponerlas al servicio de estos niños y sus familias". Pascual también ha querido agradecer a emov y Citroën su apoyo con esta iniciativa poniendo de manifiesto “lo importante que es para nosotros recibir todos los apoyos posibles para cumplir con nuestra misión”. El ha sido el vehículo elegido para lanzar emov entre los conductoros madrileños. Se trata de un automóvil pensado para unos desplazamientos con cero emisiones. Con una longitud de 3,48 m y un diámetro de giro de 9 m, se mueve en la ciudad de forma ágil. Ofrece a sus cuatro ocupantes una conducción sencilla y tranquila y un alto nivel de confort y seguridad. Sus prestaciones (velocidad máxima de 130 km/h, de 0 a 100 km/h en 15,9 segundos y aceleración de 60 a 80 km/h en 3,9 segundos) y su autonomía de 150 km cubren cualquier tipo de necesidad en entornos urbanos y periurbanos. El C-Zero permite conectar el smartphone al dispositivo Bluetooth y, además, poder cargarlo gracias a la toma USB.