Apenas quedan 10 días para que entre en vigor una profunda reforma que hará del examen práctico de conducir una nueva prueba, mejor adaptada a la realidad que tenemos actualmente en el mundo del automóvil. ¿A qué nos referimos? No hablamos de un cambio radical, ni de modificaciones que harán necesario 'reaprender' a conducir, sino a utilizar, a favor del examinado, la mayoría de asistentes que ya tenemos a nuestra disposición en la práctica totalidad de vehículos que circulan en nuestras carreteras.

Con estos cambios la DGT pretende adaptarse de forma más realista a la idiosincrasia actual, donde un coche salido de fábrica hace 10 años, es decir, en 2009, ya podía montar la inmensa mayoría de asistentes mencionados en este vídeo. ¿Crees que es una buena idea el paso que ha dado la DGT, o puede hacer que los nuevos conductores conozcan menos la forma de reaccionar en caso de situación de presión? VER VIDEO.