NO LAVES TU COCHE ASÍ
Estás arruinando la pintura de tu coche cada vez que lo lavas… y ni lo sabes
Lavar el coche parece una tarea sencilla, pero seguramente estés cometiendo un grave error (de fácil solución) que puede hacer que tu pintura deje de verse igual de bonita que el primer día.

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A la hora de cuidar nuestro coche y hacer el mantenimiento, hay tareas reservadas para los profesionales y otras de las que nos podemos encargar nosotros mismos. Para estas últimas es suficiente con tener un poco de maña y saber de la mecánica más básica, pero lo que igual no sabes (y llevas haciendo mal toda la vida) es que tu forma de lavar el coche quizá no es la más adecuada.
Es una tarea de 'mantenimiento', más estético que técnico, pero hacerlo mal puede estropear tu pintura. Muchos conductores lavan el coche bajo el sol, porque creen que así pueden ver mucho mejor las manchas y, por ende, limpiarlas. Pero no es la mejor idea y, de hecho, tiene consecuencias nefastas para la carrocería, el brillo y la durabilidad de la pintura.
El calor y el sol directo son enemigos de la pintura
Al lavar el coche a pleno sol, la temperatura de la chapa y de los cristales puede superar perfectamente los 50ºC. Y como es normal, el agua y los productos de limpieza se evaporan de manera casi inmediata, antes de que puedas aclararlos. Así que esa mala praxis en la aplicación hace que aparezcan manchas de cal y residuos de jabón que con el tiempo pueden volverse permanentes.
El resultado sería el mismo que si limpias cualquier superficie en casa con jabón o lejía y no la aclaras. Lo peor es que las manchas siempre se secan de manera irregular, lo que puede alterar el brillo uniforme de la pintura. Es más, el sol potencia la reacción química de algunos productos de limpieza y tener efecto abrasivo, todavía más notable en pinturas metalizadas o tricapa.
Y eso no es todo porque tampoco deberías utilizar esponjas o trapos secos sobre superficies calientes. El agua actúa como lubricante, así que si está seca puedes arrastrar el polvo, la suciedad y, en consecuencia, hacer pequeños arañazos en la pintura.
Los productos de limpieza tampoco serán eficaces
Hay muchos productos de limpieza, como limpiadores con jabón o ceras, que están formulados para dejarlos actuar durante unos minutos antes de aclararlos. Si los aplicas a pleno sol, se van a secar mucho antes de cumplir su función. No es el peor de tus problemas, porque no va a dañar la pintura, pero sí que van a perder toda su efectividad.
Lo mismo ocurre con limpiacristales, abrillantadores de llantas o desengrasantes. Todos ellos tienen en común que necesitan un tiempo de 'reposo' para descomponer la suciedad o formar una película protectora. En condiciones de calor extremo, en lugar de limpiar o proteger, pasan a ser una capa opaca que produce el efecto contrario y da la sensación de que llevas meses sin lavar el coche.
¿Cómo lavar el coche correctamente?
Entonces, si no podemos lavar el coche a pleno sol... ¿Cuál es la forma más adecuada de lavarlo? Pensabas que era un gesto sin demasiada complicación, pero hay algunos consejos que puedes poner en práctica:
- Evita las horas centrales del día: lo ideal es lavarlo a primera hora de la mañana o a última de la tarde, cuando la temperatura es más baja.
- Busca sombras o un lugar cubierto: si no tienes una zona techada, ponte a la sombra o, al menos, intenta ir trabajando por zonas.
- Aclara con abundante agua: no dejes que el jabón se seque. Si hace demasiado calor o estás a pleno sol, lo mejor que puedes hacer es limpiar por partes (techo, puertas, capó) y aclarar bien antes de pasar a la siguiente.
- Utiliza productos de calidad y adecuados para cada tipo de pintura: evita productos diseñados para limpiar en casa o multiusos, tu pintura (y tu bolsillo) te lo va a agradecer.
- Seca siempre con una toalla de microfibra: es un error dejar secar el coche al aire. Utiliza siempre un paño de microfibra, porque así evitarás marcas de agua y arañar la carrocería.
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