LAS ALTAS PRESTACIONES LLEGAN AL ID.3
Con espíritu GTI: así son los nuevos VW ID.3 GTX
El ID.3 es un modelo muy importante para Volkswagen, representando el concepto de movilidad eléctrica "para el pueblo" para la marca alemana. Pese a que sus primeros años no han sido fáciles, la gama del ID.3 no ha hecho más que mejorar, completándose ahora con dos variantes de corte deportivo bautizadas como "GTX".
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El Volkswagen ID.3 es uno de los modelos más importantes para la marca. Como primer modelo de la familia de vehículos eléctricos ID, el ID.3 simboliza la transición hacia la movilidad eléctrica masiva de la marca alemana, aunque hay que reconocer que sus inicios no han sido fáciles tanto por precio como por ciertos problemas a nivel de software y calidad. Cuenta eso sí con un diseño moderno y aerodinámico, y al estar fabricado haciendo uso de una plataforma modular eléctrica, ciertos aspectos como la habitabilidad interior rayan a un gran nivel.
La gama del ID.3 ha ido creciendo con el paso del tiempo, modificándose también en cuanto a acabados y equipamientos en especial tras la actualización que sufrió a mediados del año pasado. En cualquier caso, el Volkswagen ID.3, aspirante a sustituir al todopoderoso VW Golf en el algún momento, adolecía de un gran "problema" que la marca quiere ahora aliviar: la ausencia de versiones de corte deportivo y prestacional.
Es ahí donde entra en juego la nueva familia de modelos GTX, o lo que es lo mismo, las versiones eléctricas de perfil deportivo dentro de la familia ID. Conocidas ya en modelos como el ID.4 y el ID.5, ahora Volkswagen presenta las versiones GTX de la familia ID.3, que se bifurcan en dos variantes diferentes: "GTX" y "GTX Performance". A nivel estético las diferencias con respecto al resto de la gama son claras: nuevos paragolpes, nuevos colores para la carrocería, presencia de logos "GTX" en portón y puertas delanteras, taloneras específicas y nuevas llantas de aleación de 20 pulgadas.
En el interior los cambios son más leves, pero también son evidentes: los asientos de tipo "semibacket" están ahora tapizados y rematados con hilo en color rojo, contando además con la inscripción "GTX" en el hueco del reposacabezas. Esos pespuntes en color rojo también están presentes en salpicadero y puertas, que cuentan además con un acabado en símil alcántara como el de los asientos. Por otro lado, el mando giratorio utilizado hasta ahora para el cambio de marchas se sustituye por un nuevo conjunto de palancas satélites, mientras que el sistema multimedia estrena un nuevo software más avanzado y una pantalla más grande (de 12,9 pulgadas) que, además, integra por fin retroiluminación en los mandos táctiles ubicados de su base.
Mecánicamente ambas versiones impulsan únicamente las ruedas traseras y emplean el mismo motor que Volkswagen utiliza en el ID.7. La capacidad de recarga de la batería (que es nueva y ahora tiene 79 kWh de capacidad útil) alcanza hasta 175 kW en corriente continua, una cifra más que respetable que, según Volkswagen, permiten cargar la batería del 10 al 80 % en 26 minutos.
Las prestaciones de estas dos versiones son las más rápidas dentro de la gama ID.3. La versión de 286 CV puede acelerar de 0 a 100 km/h en 6,0 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h, mientras que la de 326 CV reduce este tiempo en cuatro décimas (5,6 s) y alcanza una velocidad punta de 200 km/h. Son cifras más que buenas, aunque inferiores a las de su primo-hermano el recientemente presentado CUPRA Born VZ, capaz de realizar la maniobra de aceleración en 5 segundos exactos.
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