Mi coche tiene reserva de dominio: ¿puedo venderlo de segunda mano?

A día de hoy es muy habitual que los coches nuevos que se adquieren en nuestro país lleguen a manos de sus propietarios a través de una financiera, o lo que es lo mismo: son muchos, muchísimos los coches que se financian, una financiación que permite a sus propietarios acceder a un vehículo nuevo sin tener que abonar una suma muy importante de dinero.

Cuando un coche se compra mediante financiación, la entidad financiera, la que nos presta el dinero, sigue guardando ciertos "derechos" sobre ese coche. Es lo que se conoce como "reserva de dominio", un concepto que puede jugarnos una mala pasada si queremos vender nuestro coche y cambiarlo de nombre si no hemos tomado las medidas necesarias.

¿Puedo vender mi coche bajo reserva de dominio?

La reserva de dominio es algo así como una 'capacidad extra' sobre el coche que la financiera se guarda en caso de que las cosas vayan mal y, por ejemplo, el comprador al que se le ha financiado el vehículo no pueda afrontar los pagos del mismo. La reserva de dominio permanece activa desde el mismo momento en el que el vehículo es adquirido a través de la financiera, y no se cancela generalmente hasta que el comprador no realiza el trámite para ello.

No es, por tanto, vender un coche que está bajo reserva de dominio: la DGT arrojará un resultado "negativo" a la hora de realizar la transferencia, de forma que el coche no puede cambiarse de nombre. Para cancelar una reserva de dominio es necesario, generalmente, contactar con la empresa que realizó la financiación del coche (un banco, una marca, una entidad de crédito...) y, posteriormente, acudir al registro de la propiedad donde, con la documentación aportada por la entidad, se levantará la reserva de dominio.

El proceso para realizar un levantamiento de reserva de dominio suele ser algo tedioso y, sobre todo, durar unas cuantas semanas, de ahí que te recomendemos que planifiques bien tu venta si sospechas que tu coche está bajo reserva de dominio, algo que puedes averiguar rápidamente a través de un informe de la DGT, donde se reflejará esta circunstancia en caso de que exista.