Hay elementos del sorteo de la Lotería de Navidad que cambian con el paso de los años - como lacantidad de dinero que reparte o los números más solicitados -, pero hay otros que permanecen intactos, como es el caso de la fecha del evento, el lugar en el que se celebra (al menos desde hace años) o el nombre con el que se conoce a su primer premio: el Gordo de Navidad.

La realidad es que este divertido mote lleva acompañando al sorteo navideño desde sus inicios. Mientras que la historia oficial del sorteo sitúa en 1812 el nacimiento del mismo, según cuenta el historiador Francisco José Gómez Fernández en el libro 'Breve historia de la Navidad', la Lotería de Navidad lleva celebrándose desde el 23 de diciembre de 1799, día en el que tuvo lugar el primer sorteo previo a las fiestas (sin que fuera precisamente extraordinario).

Fue en esta época, a finales del siglo XVIII, cuando empezó a gestarse el apodo que recibe hoy en día el primer premio de la Lotería de la Navidad, pues un personaje gordito y simpático pasó a ser la cara visible de la Lotería. Lo bautizaron como el 'Fanático por la Lotería' o el 'Enano Afortunado' - tal y como se puede leer en los posters que se venden en páginas web de coleccionistas - y era fácilmente reconocible por su cuerpo compuesto por bolas de la Lotería.

Su protagonismo fue tal que llegó a ser el nombre de un periódico de loterías y de toros (según recogen los ejemplares publicados en la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional), El Enano de Madrid. Y hasta le dedicaron un soneto en él, publicado en el primer número del 3 de marzo de 1851: "Aunque Enano nací no soy enano, prodigioso en saber de lotería, que el juego para mí no es un arcano, y en cábalas que os dé desde este día, de fijo, como puesto con la mano, el terno habéis de ver por vida mía".

Más allá de su nombre oficial, el Enano Afortunado comenzó a ser conocido popularmente como el Gordo de Navidad, ocupando estampas, libros y hasta décimos de la Lotería de Navidad. Su objetivo era atraer al mayor número de jugadores al sorteo a través de divertidas rimas. "De alegría y de dinero, este Enano Afortunado, si lo estudias con esmero te enseñará alborozado de la fortuna el sendero".