Si 2020 fuera un décimo de lotería, la mayoría de la población estaría de acuerdo en que este año no ha tocado ni el reintegro. El coronavirus ha puesto patas arriba la vida de millones de personas, y esto se ha extrapolado hasta en los encargados de repartir suerte. El calendario apenas marca una semana para la llegada del 22 de diciembre y, a pesar de su cercanía, muchísimos loteros y loteras temen que se confirme lo que los números ya advierten: la lotería de esta Navidad podría ser la más desastrosa de la historia.

“Se está creando la tormenta perfecta”, expresa en un tono de circunstancias Josep Manuel Iborra, presidente de la Anapal —el colectivo mayoritario de administradores de lotería—, en una conversación con laSexta.com. Iborra se muestra tranquilo, pero sus palabras denotan la inquietud que comparten muchos loteros y loteras: “En septiembre la caída de ventas ya rondaba el 30%. Necesitamos reformas, por un lado, para que podamos hacer frente al tiempo que hemos tenido que cerrar por la pandemia y, por otro, para salvar los gastos del sorteo de Navidad”, expresa.

La Anapal ya informaba de estos datos en un comunicado del pasado 26 de octubre. Según los cálculos de la entidad, la evolución de los ingresos en “los colectivos que tradicionalmente son el motor de las ventas”, como son los clubes deportivos, las empresas o las entidades festivas, había caído en un 50% entre los meses de junio y octubre en comparación con el año pasado. Ante esto, la Anapal denunció lo ocurrido en un informe y se puso en contacto directo con la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE).

Ambas entidades se reunieron el pasado 17 de noviembre y los resultados de la conversación, como explica la propia asociación, siguen arrojando dudas: “La preocupación por la evolución de la actividad comercial ya se trasladó a los responsables de SELAE”, escribe la organización, que incide en que calificaron las actuaciones realizadas hasta el momento por parte de Loterías de “claramente insuficientes”.

“Un cierre sin precedentes”: las conclusiones de los que más saben de Lotería

LaSexta.com también se ha puesto en contacto con un despacho especializado en el asesoramiento legal y jurídico de Administradores de Loterías. Y, según explica Alejandro Castaño, jefe de comunicación de Hedilla Abogados, se confirma la mala situación de la que advertía la Anapal: “La venta de Administraciones de Loterías se ha visto afectada por la crisis del COVID-19. Las medidas adoptadas por las instituciones públicas han provocado un cierre de este tipo de negocios sin precedentes”.

En esta línea, según apuntan desde el bufete, los administradores de lotería han visto paralizados sus ingresos más importantes: “Los datos de venta de juegos del Estado han descendido drásticamente”, insisten.

Ahora bien, ¿es esta situación igual en todos los lugares con licencia para vender Lotería de Navidad? Castaño explica que no: “En el caso de los denominados Terminales Mixtos, que están ubicados en un negocio principal, por lo general un estanco, un bar o una papelería, el descenso de las ventas ha sido menor”.

A pesar de que los expertos afirman que este tipo de negocios sí se han visto en parte afectados, la radiografía restante de sus ventas muestra unos daños bastante más livianos: “No les afecta de una manera tan directa la venta de Lotería de Navidad. Asimismo, el traspaso de este tipo de negocios se ha paralizado también, pero no en la misma medida que las Administraciones de Loterías, debido a que el precio de venta es mucho más pequeño”, sentencian.

Todavía quedan unos días para el sorteo, y la Anapal confía en que se pueda salvar la campaña de este año. Aun así, el presidente de la organización insiste en que este no es solo un problema de los loteros: “Hay 1.200 millones de euros en juego, y la mayor parte son para las arcas públicas”. Es decir, que de ser un mal año para las administraciones, espeta Iborra, podría ser un mal año para todos.