El PP ha intentado que las conversaciones con Vox para formar gobiernos no entraran en la agenda de la precampaña, pero el calendario avanza y la formación de los ayuntamientos el sábado apremia. Siete grandes ciudades y 128 municipios en los que el PP necesita a Vox para gobernar. En total 135 ayuntamientos.

La Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares, Extremadura... viven horas clave para conocer su futuro. Vox apuesta por repetir la fórmula de la Junta de Castilla y León, donde PP y Vox gobiernan juntos con García-Gallardo como vicepresidente. Y es que los de Abascal creen que, en otros casos en los que el PP ha gobernado en solitario con apoyos puntuales de Vox, los 'populares' han incurrido en "deslealtades", circunstancia que con esta fórmula se pretende evitar.

El principal choque se ha vivido en las última horas en la Comunidad Valenciana a causa de la condena por violencia machista que pesa sobre el candidato de la formación de extrema derecha, Carlos Flores. Desde Génova planteaban su candidatura como una 'línea roja', pero el PP valenciano se mostraba abierto a negociar. Tras un reunión de más de tres horas entre el PP valenciano y Vox, el propio Flores ha anunciado un principio de acuerdo para gobernar en coalición. Vox se haría con la presidencia de Les Corts y con varias consellerías. Flores se apartaría de esa coalición para ir como 'número uno' en las listas de Vox por Valencia al 23J.

Fuentes del Gobierno a laSexta califican el acuerdo de "vergüenza". "El PP traslada su línea roja de Valencia a Madrid, porque este señor va en las listas del Congreso", añaden incidiendo en que "es un tema muy grave". "El PP quiere acceder a las instituciones rápidamente y sin escrúpulos. Quieren controlar las instituciones a cualquier precio", aseveran.

El acuerdo con la extrema derecha también es ya un hecho en Elche. PP y Vox han cerrado un acuerdo para los próximos cuatro años en el ayuntamiento de Elche, la tercera ciudad en población de la Comunitat Valenciana, donde el PSOE fue la lista más votada el 28M. El popular Pablo Ruz y Aurora Rodil, de Vox, ha firmado el acuerdo de gobierno en la pedanía de Valverde con la ermita de fondo, una imagen que también transmite mucho. Los detalles del compromiso no han trascendido.

Desde el partido de extrema derecha, el secretario general Ignacio Garriga no ocultaba este lunes el interés de Vox por estar en todos los gobiernos que pueda. Así, Garriga hacía un llamamiento público al PP para sellar acuerdos en los 135 municipios en los que sus votos son necesarios para evitar gobiernos de izquierdas, garantizado que negociarán "donde haga falta y hasta donde haga falta" pero dejando claro que no aceptarán "chantajes" ni "presiones".

"Nuestra disposición es total y absoluta siempre que se respete a los votantes de Vox", decía remarcando que el partido no está interesado en los "sillones" sino en un verdadero cambio de políticas. El dirigente de Vox ha subrayado que este es el mensaje que debe tener claro el PP. "De nada sirve una vicealcaldía o una concejalía si no es para cambiar de verdad las políticas", ha reiterado.

Y ponía como ejemplo los ayuntamientos de Guadalajara o Elche (Alicante), donde ya ha sido posible este acuerdo. Según revelaba, los puntos que Vox exige para la negociación versan sobre presión fiscal, educación, seguridad o "acabar con el despilfarro".

Desde el PSOE, el secretario de Organización y 'número tres' del PSOE, Santos Cerdán, cree que el PP dejará el "postureo" y gobernará con Vox en todos los ayuntamiento "donde lo necesite" porque "en el fondo no son tan diferentes". A través de un mensaje publicado en su cuenta de Twitter. "135 ayuntamientos están en riesgo de acabar en manos de los que niegan el cambio climático, la violencia de género, el derecho al aborto, quieren el pin parental... En el fondo no son tan diferentes", ha expresado.