Los pactos entre PP y Vox preocupan a los españoles, aunque los populares aspiran a gobiernos en solitario "fuertes y estables". Con las elecciones generales a la vista, Cuca Gamarra acusa al PSOE de radicalizarse y presenta al PP como la opción "moderada". "Esta sobredosis de confrontación, agresividad, insulto y descalificación se va a encontrar con un frontón", ha afirmado la secretaria general del Partido Popular y portavoz de los populares en el Congreso.

Por su parte, el PSOE mira a su izquierda para interpretar los resultados electorales. "La fragmentación a la izquierda del PSOE ha dado alas al PP y a Vox", ha criticado María Jesús Montero, cuyo objetivo en las generales es aunar el voto para un Gobierno solo del PSOE. "Aspiramos a una mayoría incuestionable para gobernar en solitario", ha manifestado la vicesecretaria general del PSOE en una entrevista en 'El País'.

Voces socialistas se refieren a los resultados en las elecciones del 28M sin muchos tapujos. Es el caso, por ejemplo, de Susana Díaz, que dice que los socialistas están "todavía de duelo". "Han pasado muy pocos días y todavía hay tristeza; estamos jodidos", reconoció la expresidenta de la Junta de Andalucía en laSexta Xplica.

Otras salen más decididos a dar la batalla, como José Luis Ábalos, quien ha dicho en una entrevista en 'El Español' que tiene "ganas de brega", y que Feijóo "lidera una tropa de 'trumpistas'".

Mientras, el PSOE reedita un pacto con el PNV en ayuntamientos y diputaciones en Euskadi. Este domingo se han producido elogios cruzados de los socialistas al PNV y de los nacionalistas vascos al PSOE. "Las coaliciones entre el PNV y el Partido Socialista de Euskadi dan estabilidad al país", ha defendido Andoni Ortuzar.

En Barcelona, Trias intentará convencer a Esquerra y socialistas para alcanzar la alcaldía, al tiempo que en Alcorcón la izquierda se hace con la mayoría tras la revisión del escrutinio. Por 42 votos, el PSOE se queda con el último concejal y podrá formar gobierno con el bloque progresista.

El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, durante un acto de campaña de JxCat en Colliure (Francia).

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