El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, ha entrado en la campaña electoral con una incendiaria carta pastoralen la que, bajo el título 'De incendios y elecciones generales', ataca duramente al Gobierno, defiende a la ultraderecha, y llega incluso a burlarse de la activista Greta Thunberg y "sus cambios climáticos".

"Se ha escuchado últimamente un adjetivo lleno de prejuicio etiquetador, para advertir del lobo que viene: «cuidado con los ultracatólicos»", expresa el arzobispo, a lo que añade: "Lo de 'ultra' resulta ser un recurso curioso, especialmente en la boca de los amigos de todos los excesos paniaguados, las malas compañías que imborrables tienen en sus genes la sangre de sus actos terroristas o la rentable monserga de sus aspiraciones 'indepes', aliñadas con secesiones y bendecidas con indultos como moneda de cambio".

Así, con clara alusión al Gobierno, Jesús Sanz Montes critica sus "políticas erráticas nutridas de mentiras patentes y mucha ideología", mientras que defiende "la libertad en la expresión religiosa y cultural y en la elección educativa que para los hijos tienen los padres". Asimismo, pide "respeto por la historia, sin reescribirla con memorias tendenciosas y falseadas que reabren heridas", así como "evitar confrontaciones que dividen y enfrentan fratricidamente".

Por ello, según dice, las próximas elecciones del 23J son "una oportunidad de reestrenar lo que vale la pena". "Entre el desastre trucado y mendaz y el cambio deseable, hay que escribir pacientes un itinerario juntos, especialmente las gobernanzas políticas salientes con sus propios matices complementarios, como bomberos verdaderos, lejos de los pirómanos mendaces. España lo necesita y se lo merece", manifiesta el arzobispo.