El PP se entrega a la ultraderecha. La formación de Núñez Feijóo ya ha facilitado que Vox presida tres parlamentos autonómicos, los mismos que preside el PSOE, y ha dado un giro de guion para permitir llegar a acuerdos en autonomías en las que los líderes 'populares' hasta ahora se habían negado a la entrada de la ultraderecha en su posible investidura, como Extremadura o Murcia. Este mismo lunes, Espinosa de los Monteros también ha remarcado que las negociaciones siguen abiertas en Aragón y Baleares: "Cuando hay voluntad de entendimiento se llegan a acuerdos".

Con el nombramiento de la diputada ultracatólica y antiabortista Llanos Massó como presidenta de las Corts Valencianes esta misma mañana, la ultraderecha se afianza tres de las doce cámaras autonómicas elegidas el 28M, las mismas que tendrá el PSOE y dos menos de las que presidirán los 'populares'.

Los tres presidentes de Vox han sido elegidos gracias a pactos con el PP -Gabriel Le Senne en el Parlament balear, Marta Fernández en las Cortes de Aragón y la mencionada Llanos Massó en las Corts Valencianas-, mientras el partido de Santiago Abascal solo ha prestado sus votos a una candidata 'popular': María José González en el Parlamento de Cantabria, frente al aspirante regionalista apoyado por el PSOE.

Un hecho que se une al giro de guion en autonomías que, hasta ahora, se habían cerrado a llegar a acuerdos con la extrema derecha. Es el caso de Murica, donde el PP ha insistido este lunes que está abierto a hablar con VOX para llegar a un acuerdo programático y encontrar "puntos comunes" de los programas electorales que les permita "llegar a un acuerdo y posibilitar un Gobierno estable".

Así lo ha manifestado el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Joaquín Segado, que ha informado de que ellos propondrán como candidato a presidir la Comunidad a Fernando López Miras: "Si nos sentamos a hablar seguro que podemos encontrar puntos comunes que nos permitan llegar a un acuerdo y que posibilitara un Gobierno estable con un acuerdo programático", ha aseverado.

Los 'populares' se acercan así a la ultraderecha y diluyen la tensión que hace tan solo una semana primaba en la región cuando las negociaciones entre Vox y el Partido Popular para que la formación de extrema derecha facilitara con su abstención un gobierno del PP saltaban por los aires. Los 'populares' no les otorgaban la presidencia de la Asamblea y desde la formación liderada por Abascal amenazaban con la repetición electoral.

La misma actitud conciliadora muestran desde Vox, cuyo portavoz parlamentario, José Angel Antelo, ha reiterado que su mano "sigue tendida desde el día de las elecciones. Hasta la fecha no ha habido ningún tipo de negociación, pero esperamos que la haya porque la Región nos ha dicho que nos tenemos que poner de acuerdo y que tenemos que conformar un Gobierno estable que suponga más del 60% del voto en la región. Ese es el mandato de las urnas, nosotros lo hemos escuchado desde el primer día y hay gente que va a necesitar más tiempo a la hora de escucharlo, pero esperemos que lo escuche porque otra cosa no se entendería".

El 'volantazo' también ha llegado, a su vez, de la otra autonomía que se cerraba a la ultraderecha.La 'popular' extremeña María Guardiola, que hace tan solo una semana desafiaba a Vox, ahora afirma que hay que "respetar" y "dialogar" con la formación de extrema derecha. Así lo ha expuesto en una carta enviada a la militancia en la que destacaba ser "muy consciente de que también es imprescindible el acuerdo y el diálogo para llegar a un acuerdo pragmático" con la ultraderecha. Lejos quedaban así las líneas rojas a la formación en su Gobierno por negar la violencia machista y deshumanizar a los inmigrantes o amenaza los derechos de las personas LGTBI.

Según ha podido saber laSexta, la candidata 'popular' se habría visto presionada por la líder de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Fue tras su investidura cuando Guardiola decidió escribir a Pelayo Gordillo (Vox Extremadura) para verse algún día para hablar "sin reproches".

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sido una de las voces 'populares' más fuertes en favor de la entrada de la extrema derecha en los Ejecutivos regionales. A pesar de tener mayoría absoluta, la presidenta madrileña elogió en su investidura a la formación de Abascal y este mismo lunes ha instado a no poner "líneas rojas" a los pactos con Vox: "Con la cantidad de problemas que hay en Espala, no voy a entrar el manual de 'abc' que quiere imponer la izquierda con sus mantras de buenos y malos".

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