Una de las consecuencias inmediatas del estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo de 2020 en nuestro país, ha sido la caída de las coberturas vacunales.

Bien por las restricciones de movimiento, bien por el miedo al contagio o bien por el cambio de funcionamiento en los centros de vacunación dando prioridad esas primeras semanas a la crisis sanitaria, la realidad es que hemos sido testigos de una reducción de hasta un 50% en la administración de algunas vacunas como puede ser triple vírica que incluye el sarampión.

Ya a mediados del mes de abril la OMS alertaba de la difícil situación que estaban viviendo algunos países de recursos medios o bajos donde las campañas complementarias de vacunación frente al sarampión y la polio en respuesta a brotes activos, estaban siendo suspendidos con las graves consecuencias que podría generar en millones de niños. De hecho, la propia OMS afirmaba que más de 117 millones de niños podrían perder la vacunación del sarampión prevista este año.

Es por ello que, la OMS insta a las autoridades sanitarias mundiales para que hagan los esfuerzos necesarios para mantener intactos los programas de vacunación infantiles y del mismo modo faciliten la reanudación de todos aquellos que se han tenido que retrasar por causa mayor.

No olvidemos que, a pesar de tener una vacuna segura y efectiva, el sarampión mató en 2018 a 140.000 personas en su inmensa mayoría niños menores de cinco años, un auténtico drama.

Si comparamos los datos entre el año 2000 y el año 2018, la vacunación frente al sarampión evitó la muerte de 23 millones de personas. Así que como veis este es un tema muy importante.

Si hablamos de España los datos de los que disponemos de la Comunidad Valenciana, por ejemplo, muestran una caída de:

  • Un 5-7% en las vacunas de los 2 meses.
  • Entre un 25 y un 19% en las vacunas de los 4 meses.
  • Hasta un 54% en la triple vírica de los 12 meses.

Estas caídas han sido aun más acusadas si hablamos de vacunas no financiadas como el rotavirus o el meningococo B.

Así que ha llegado el momento de ponernos al día, de recuperar todas esas vacunas que se han quedado pendientes y de garantizar las coberturas que teníamos antes de la crisis sanitaria. La salud de nuestros hijos está en juego.

¿Qué debo hacer si a mi hijo le falta alguna vacuna?

Contacta con tu centro de salud, tu pediatra o tu centro de vacunación. Ellos te informarán de los nuevos circuitos para vacunar y te darán una cita para acudir con tu hijo. ¡Y recuerda llevar tu propia mascarilla al centro sanitario!

Si te proteges, nos proteges.