Termina el verano y seguimos con la triste realidad de que aumentan las víctimas de violencia machista y encima tenemos que aguantar que nos digan, desde los platós de televisión, que no existe.

Un hombre asesinó hace unos días a su exmujer, su excuñada y su exsuegra en presencia de sus hijos y solo un día más tarde otro hombre mató a puñaladas a su expareja, también con sus hijas delante.

Ante esta situación de emergencia feminista varios colectivos han convocado una manifestación para reivindicar que se tomen medidas. Es necesario que haya un gobierno de izquierdas para que se pongan en marcha muchas medidas, para que se respete el pacto contra la violencia machista y se mejoren las leyes con respecto a la violencia sexual, etc. Nos va la vida y la libertad en ello.

No podemos ver los asuntos políticos como algo lejano a nosotras, sino como algo vital para la supervivencia del conjunto de las mujeres.