El nuevo estudio, liderado por Jiaferng Liu de la Universidad Hebrea de Jerusalén, sugiere la necesidad de considerar la tolerancia a los medicamentos a la hora de diseñar nuevos tratamientos con antibióticos con el fin de prevenir el desarrollo de patógenos resistentes.

En 2019, solo en Estados Unidos se han identificado más de 2,8 millones de infecciones resistentes a los antibióticos, con un resultado de más de 35.000 muertes. Por lo que, el uso de combinaciones de medicamentos anti-microbianos se ha convertido en una práctica clínica común para tratar las infecciones más graves y rebeldes.

En este sentido, la resistencia a los antibióticos vuelve a los microbios invulnerables ante medicamentos diseñados para eliminarlos. Pero además, puede volverlos más tolerantes, lo que a menudo se asocia con el fracaso de los tratamientos con antibióticos y la recaída de las infecciones.

En concreto, los investigadores han analizado la trayectoria evolutiva de 'Staphylococcus aureus resistente a la meticilina' (SARM), potencialmente mortal, aislado a partir de pacientes sometidos a un tratamiento combinado para infecciones sanguíneas persistentes. De esta forma, encontraron una rápida aparición de poblaciones microbianas de tolerancia, seguida por el desarrollo de resistencia, a pesar del tratamiento combinado.

Por ello, una vez establecida la tolerancia para uno solo de los medicamentos, los beneficios de usar combinaciones de medicamentos han acabado por perderse. Mientras que los experimentos con diferentes clases de antibióticos producían resultados similares.