La revista JAMA ha publicado un estudio sobre la posible influencia de la terapia hormonal en la menopausia, realizado por la Iniciativa de la Salud de la Mujer. El objeto de esta investigación han sido 27.347 mujeres de 50 a 79 años a las que se les ha hecho un seguimiento durante 18 años. Esto se ha podido hacer gracias al conocimiento de las causas de sus muertes.

La autora principal JoAnn Manson ha declarado que “la mortalidad por todas las causas constituye una medida sumamente importante para una intervención como la terapia hormonal que tiene una compleja matriz de beneficios y riesgos”. “Las tasas de mortalidad son la última “línea de fondo” al evaluar el efecto neto de un medicamento sobre los resultados de salud graves y potencialmente mortales”.

La terapia hormonal alivia los sofocos, los síntomas de menopausia y disminuye el riesgo de fracturas de la cadera. A pesar de estos beneficios, se la relaciona con la formación de coágulos venosos, accidentes cerebrovasculares y algunos tipos de cáncer. Sin embargo, “en este nuevo análisis, encontramos que no había asociación entre la terapia hormonal y la mortalidad por todas las causas durante el periodo de tratamiento o el seguimiento a largo plazo de estos ensayos” ha resaltado Manson.

En el estudio, han concretado el impacto hormonal sobre las tasas de mortalidad por grupo de edad. Durante el seguimiento de estos 18 años, se produjeron 7.489 muertes. Los resultados de mortalidad fueron más favorables entre las mujeres más jóvenes con terapia hormonal en comparación con las de mayor edad. En el siguiente grupo (50-59 años) que contaban con 5-7 años de tratamiento, la tasa de mortalidad fue un 30% más baja entre las mujeres que recibieron terapia hormonal frente a las que ingirieron placebo. Por otro lado, las mujeres que recibieron la terapia entre los 60 y 70 años no se observó ningún efecto. Pasados 18 años (10-12 años de seguimiento tras dejar la terapia) las diferencias no eran estadísticamente significativas. No hubo diferencia entre las tasas de mortalidad de las mujeres que recibieron terapia de las que tomaron placebo.