Cuatro años después de que se aprobara este Plan Estratégico (PEAHC) en el Sistema Nacional de Salud, el número de ingresos hospitalarios por cirrosis descompensada ha caído en más de un 60 %, y la lista de espera de trasplante hepático por hepatitis C se ha reducido en gran medida.

Este logro, del que ha informado la Alianza para la Eliminación para las Hepatitis Víricas en España (AEHVE), es tan solo un pequeño paso para la meta que pretende eliminar la hepatitis C para 2021. Por ello, la organización pide a los distintos partidos políticos que no se olviden de quienes sufren esta enfermedad, e “incorporen a sus programas electorales el compromiso de actualizar el PEAHC para avanzar en su eliminación definitiva”.

Además, según esta asociación, para cumplir las recomendaciones que la OMS ha elaborado para los países desarrollados, se necesita una estrategia a nivel nacional para el cribado de los casos de hepatitis C sin diagnosticar, así como para acercar los tratamientos necesarios a los grupos donde se produce la mayor parte de nuevas infecciones.

En este último punto, también se estima urgente la prevención de la enfermedad y los tratamientos enfocados en evitar reinfecciones. Para ello, desde AEHVE destacaban la importancia de una mejora en la educación para la salud y en materia de políticas de prevención para evitar nuevos casos de hepatitis C.